Permite que el amor desate los nudos por ti

Una de las razones que más limita la medicina occidental tradicional es el ignorar las emociones/recuerdos como causa de un malestar o enfermedad. En lugar de preguntar: ¿Se ha tomado las pastillas? ¿Está comiendo saludablemente? ¿Está tomando dos litros de agua al día?  O ¿Está usted haciendo ejercicio? Es más humano preguntar: ¿Con quién ha discutido últimamente? ¿Qué es lo que le mantiene tan dolida, enojada o temerosa? ¿Algún recuerdo doloroso que se resiste a marcharse? ¿De qué siente culpa?. La razón de esto es que quien consulta necesita hablar con alguien, sentirse escuchad@ (por no mencionarte un abrazo), más que tomarse varios cartones de pastillas.

Y esto no significa que estoy en desacuerdo con el medicamento, aclaro, porque si bien conozco la potente energía que significa el amor, también sé que hay caminos necesarios y que en determinados momentos una pastilla puede serlo, por lo tanto puede sacarte temporalmente de un mal momento. Significa que si tu vocación es ayudar, debes comenzar por el afecto y la amabilidad. Significa que si eres la o el consultante, tienes la tarea de rodearte más a menudo con tus propios brazos.

A lo que yo hago referencia es a que no dejes de lado la causa de tus malestares, que es siempre emocional. Tómate tu medicamento (si así lo deseas), pero al mismo tiempo, desenreda el nudo de emociones escondido en las profundidades de tu mente. Vuelve al amor que es tu centro, tú hogar, la energía de donde vienes y la razón por la cual estás aquí. Permite que el amor desate los nudos por ti. Sólo di: te amo, lo siento, perdóname, gracias. Las veces que más puedas. Yo sé que sabes perdonar y amar. Pero ¿Sabrás decírtelo a ti mism@ permanentemente? ¿Estás preparad@ para regalarte amor, gratitud y perdón de forma incesante?.

Siempre que puedas perdónate por lo que te ha lastimado y cuando tengas que ir a donde el médico, haz una limpieza previa de tu mente para que encuentres en él/ella la guía perfecta, lo que necesitas para caminar liger@. Esta limpieza da inicio cuando le dices: te quiero. A todo lo que encontrarás allí.

Eso es amor y es todo lo que necesitas. A partir de ahí, lo que llegue es bienvenido. Hiciste tu parte.

Todas las enfermedades (no la mayoría; sino todas), penetran primero: tu cuerpo mental. Segundo: tu cuerpo emocional. Tercero: tu cuerpo físico. Lo que equivale a: recuerdo / emoción / síntoma – enfermedad. Lo que significa que lo que hay que dejar ir en esencia es información. Dejar ir los datos es la llave maestra.

Gracias por leerme.

 

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